fisioterapia taurina

-Las principales figuras del escalafón cuentan con un fisioterapeuta personal que les acompaña durante la temporada taurina para asegurar su bienestar físico

-La Fisioterapia es fundamental para asegurar las óptimas condiciones físicas y el rendimiento de los toreros

El Colegio de Fisioterapeutas de Andalucía y la empresa 'Plaza de Toros de La Merced' de Huelva han renovado su acuerdo de colaboración, pionero en el mundo de los toros, que se desarrollará durante el transcurso de la Feria de Colombinas, del 3 al 7 de agosto.

La iniciativa, propuesta por el vocal por Huelva y tesorero y del Colegio de Fisioterapeutas, José Luis Borrallo, consistirá en la prestación de atención a los toreros y sus cuadrillas en el hotel por las mañanas, siempre que lo soliciten y en la plaza de toros desde media hora antes hasta media hora después de la celebración del festejo. “Se trata de un servicio que en la actualidad sólo ofrece la Plaza de Toros de Huelva y que a buen seguro se extenderá en los próximos años a ferias taurinas de toda España”, asegura el fisioterapeuta José Luis Borrallo.

Firma del acuerdo
Por lo general, y en su día a día, los toreros conceden mucha importancia a su preparación física y recurren al trabajo de Fisioterapia para la recuperación de lesiones, la puesta a punto y el entrenamiento diario o para la recuperación y vuelta a los ruedos tras un posible percance. De hecho, algunos toreros como Enrique Ponce cuentan con un fisioterapeuta de confianza al que acuden con regularidad o que incluso llevan consigo de forma permanente durante toda la temporada.

Según José Luis Borrallo, los tratamientos más frecuentes realizados el año pasado durante las Colombinas a toreros y banderilleros fueron masajes de descarga, estiramientos y recuperación de lesiones como tendinitis y roturas fibrilares.

Las lesiones habituales en los toreros suelen ser contracturas musculares y disfunciones vertebrales sobre todo en la región cervical, dorsal y lumbar, así como las tendinitis en el hombro, el codo o la muñeca. Todas estas lesiones se producen como consecuencia, en primer lugar de la acción de torear, en plazas y tentaderos, de malas posturas en largos viajes y hoteles, y el estrés y la presión psicológica del torero.

También son frecuentes las lesiones de origen traumático como contusiones, esguinces de rodilla, tobillo, muñeca y cervical o hernias discales. Por último, las menos frecuentes pero, “evidentemente las más graves” son las heridas producidas por asta de toro.